Resultados salida de campo II

IMPRESIÓN BOGOTANA DE VENEZOLANOS EN LA CIUDAD



¿Cuál es la percepción de los bogotanos frente a la comunidad venezolana? fue la pregunta generadora de nuestra salida a las calles de Bogotá, donde encontramos diversas reacciones y posiciones frente a los emigrantes venezolanos.

A pesar de que, Migración Colombia anuncie que la cantidad de venezolanos en el país asciende a 470.000 ciudadanos (El País, 26 de octubre del 2017) y que adicionalmente, este tema migratorio afecta también directamente al servicio de salud. Aunque más de la mitad de encuestados (53,2%) afirme que no le perturba la presencia de los venezolanos, las afectaciones dejan ver otro resultado, ya que todos los encuestados han elegido una opción de afectación. Los bogotanos evidencian que la movilidad o fácil acceso al transporte ha sido el principal problema al que se están enfrentando, ya que un sistema de transporte que ha colapsado con los nacionales, imaginemos ahora con los extranjeros. Pero también en temas económicos se evidenció afectaciones en bogotanos según la encuesta, principalmente los que a diario buscan ingresos a través del trabajo informal y el “rebusque”, esto se contrasta con las afirmaciones que han hecho los vendedores ambulantes de la ciudad: “La situación está bastante difícil, ya que lamentablemente ha habido mucha problemática sobre la cuestión del trabajo que se vive directamente en el Transmilenio” (Pulzo, 15 de agosto del 2017, Parr.3).

El notorio crecimiento social de las localidades que han percibido el 84% de la población encuestada, hace un gran llamado a la administración distrital, este fenómeno requiere de una planeación y adecuada gestión de riesgo; no hay que esperar algo fatal para actuar. Sin embargo, vemos una aceptación y convivencia por parte de los bogotanos, pese a los conflictos en movilidad, la ciudadanía apoya el proceso migratorio y está de acuerdo en brindar oportunidades a ellos, nuestros hermanos que tanto lo necesitan. La inclusión en educación ha sido clave, las propuestas del ministerio de educación han sido favorables al aceptar a los venezolanos, sin negar el acceso a este derecho fundamental; pero el acceso a salud ha sido denigrante. De 81 respuestas a favor de invertir en los emigrantes, solo 30 personas afirman que la salud. Nos preguntamos si en esta respuesta puede llegar a influir la forma en la que el sistema de salud colombiano está diseñado; o en cierto modo, el miedo u odio que pueden llegar a sufrir los bogotanos sobre la incursión de la migración en un sistema que no da abasto para la población. Creemos que aún es muy difícil saberlo, dado la diversidad de Bogotá, las edades, las personas que residen, unas que pueden ser autóctonas, otros desplazados por violencia en el país o incluso extranjeros que sabemos que por múltiples razones han llegado a nuestra ciudad. Con respecto a esto se ve que la alcaldía ha lanzado un plan de atención en salud para venezolanos, plan que tiene como finalidad orientar y brindar información a la población en condiciones de vulnerabilidad. sin importar si su entrada es legal o ilegal. El distrito manifestó que “La migración humana es uno de los principales retos de salud pública en el mundo, debido a los riesgos que representa para los territorios de acogida’’ (Redacción Bogotá, 2017). Finalmente, aunque los bogotanos no les incomoda la presencia de los venezolanos, sienten cierto temor de competir contra ellos, en un Estado donde la desigualdad de oportunidades es notoria.



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